Consejos Reguladores (DOP's e IGP's)

Atrás C.R.D.O.P. Chufa de Valencia

 

Todos hemos disfrutado de un refrescante y delicioso vaso de horchata de chufa, pero probablemente muchos desconocen de dónde viene la materia prima que es la base de esta tradicional bebida vegetal. ¿Qué es la chufa?

Mucha gente piensa que la chufa es un fruto seco, confusión a la que contribuye su nombre en inglés (tigernut), pero en relaidad es un tubérculo que necesita unas condiciones climáticas y edafológicas muy especiales para su cultivo, lo que hace que en toda Europa únicamente se cultive en un pequeño número de municipios de la huerta norte de Valencia.


La chufa de Valencia, tras pasar 9 meses en el campo, se recolecta, se lava y se lleva a secaderos especiales. Es en este punto donde se da una de las operaciones que más influencia tiene en su calidad final: el lento y cuidadoso secado que se prolonga durante más de tres meses y que influye de forma determinante en las características únicas de la chufa de Valencia y que lo diferencian de chufas de otras procedencias.

El resultado final es una chufa cuya calidad ha sido reconocida con la Denominación de Origen Protegida Chufa de Valencia, la máxima distinción a nivel de calidad Agroalimentaria que ofrece la Unión Europea, una distinción que garantiza la excelencia del producto y el vínculo de esta calidad a un territorio de referencia. la chufa de Valencia es calidad, naturaleza, cultura y patrimonio.

La chufa de Valencia, un superalimento de moda.

La chufa de Valencia se ha convertido hoy en día en un referente de salud y energía en todo el mundo con múltiples propiedades beneficiosas para el organismo avaladas por diversos estudios médicos.

La chufa posee propiedades digestivas muy saludables por su alto contenido en almidón y aminoácidos. Además es rica en minerales como el fósforo, el magnesio, el potasio y el hierro, además de grasas insaturadas y proteínas. Además, no contiene gluten, ni lactosa, tiene una gran cantidad de fibra y en la piel de la chufa encontramos elevadas cantidades de suberina que actúa como prebiótico puesto que favorece el crecimiento de la flora intestinal beneficiosa fermentativa y tiene un perfil lipídico, con una cantidad de ácido oleico (contiene un 77% de ácido oleico) muy similar al aceite de oliva.